El blanqueamiento dental es un tratamiento estético, que devuelve a tu sonrisa la tonalidad blanca natural de nuestros dientes, que se han ido deteriorando con el paso del tiempo, volviéndose más amarillos.
En la actualidad, son numerosos las personas que se interesan por los blanqueamientos por diversas razones: desde la búsqueda de satisfacción personal hasta necesidades de tipo laboral.
Los tipos de blanqueamientos se clasifican según el producto que lleven y dónde lo realices. En la actualidad tienes 4 tipos de blanqueamientos:
- En clínica, de efecto rápido, bajo supervisión de tu dentista, usando diferentes concentraciones de peróxido de hidrogeno y en ocasiones luz como agente activador.
- Debes saber que, la luz calienta puede estimular la acción del blanqueante, pero también produce sensibilidad.
- De uso ambulatorio, a un precio moderado y se usan en casa con peróxido de carbamida, a una concentración más baja y, por tanto, produciendo menos sensibilidad.
- Con férulas termoformables, a un precio moderado y se usan en casa con PAP, a una concentración más baja y, por tanto, produciendo menos sensibilidad.
También tienes productos low cost… a un precio muy bajo y de dudosa efectividad. Estos últimos son los que debes dejar a un lado, ¡a veces lo barato sale caro!
¿Qué blanqueamientos se usan en la actualidad?
- Peróxido de hidrogeno, es conocido comúnmente por ser agua oxigenada. Es un compuesto químico que contiene oxigeno e hidrogeno, tiene un efecto reductor y oxidante, para disolver manchas y blanquear tus dientes. Se aplican en porcentajes de concentración que van del 0,1% al 40%. Todos aquellos que no superen el 0,1% pueden comprarse libremente… pero tienen una concentración tan baja que apenas blanquean.
- Peróxido de carbamida, compuesto por peróxido de hidrogeno y urea. Este se descompone para disolver las moléculas de suciedad en el esmalte dental . En este caso la concentración máxima aceptada de venta al público en España será inferior al 0,3% y de resultados limitados.
- PAP (ácido ftalimidoperoxicaproico) es un compuesto químico que funciona como los anteriores, pero sin peróxidos, por lo que se puede adquiriri en alta concentración siempre que se estabilice correctamente, de manera totalmente segura y efectiva.